Tuve el placer de compartir firma de libros el pasado sábado con ella y lo volveré a hacer el viernes 13 por la tarde. Carolina Miyata es una fantástica y brillante autora que desde la serenidad y tranquilidad que desprende provocá a la par curiosidad y entusiasmo.
Es una gran conocedora del fenómeno asiático, por convicción, por antedentes familiares y por su vinculación laboral y con la naturalidad de una persona que conoce de lo que habla, fue capaz de explicarme de una manera muy simple, la esencia de su libro que he devorado en estos días.
Napoleón ya lo dijo: "Dejemos que China duerma porque cuando despierte, sacudirá el mundo". China ha despertado y a partir de este momento todo puede cambiar.
La sinopsis del libro adelanta:
"A modo de llamada provocativa a la reflexión sobre el fenómeno China, el título pretende anticipar uno de los escenarios posibles en un futuro más cercano de lo que se piensa. Superar el tópico de China como fábrica de productos de bajo consumo u oferta infinita de proveedores es más necesario que nunca por una cuestión de supervivencia. Sólo asiatizando el punto de vista, ampliando miras, se podrá entender a China como una oportunidad para las carreras profesionales. El futuro proveedor, cliente y jefe pueden ser chinos"
En uno de los párrafos se puede leer:
"Asia ha conseguido, en tan solo veinte años (1970-1990) de desarrollo económico frenético, reducir la cifra de habitantes que viven por debajo del umbral de la pobreza de 400 a 180 millones, y ello a pesar de que su población ha crecido dos tercios. En la historia de la humanidad jamás se había producido semejante mejora en la calidad de vida de un volumen tan elevado de población. China, el estandarte de este nuevo orden, representa la segunda mayor potencia económica del mundo…"
Profesionalmente, Carolina Miyata es licenciada en Ciencias de la Información , especializada en el sector de telecomunicaciones y nuevas tecnologías. Gracias a ello ha trabajado en distintos puntos de Asia como Hong Kong, Singapur, Shanghai, Tokio o Fukuoka de donde es originario su padre.
Carolina habla cuatro idiomas. Por su vinculación familiar, padre japonés y madre española, por su trabajo y por propio interés esta muy al tanto del pasado, presente y futuro de China.
En lo personal es una persona comprometida, visionaria y enamorada de los contrastes. Le gusta disfrutar de las pequeñas cosas y aunque debe viajar a menudo por su trabajo, siempre intenta sacar un hueco para una cena en un restaurante nuevo, una copa con unos amigos o un paseo por algún rincón de Paris o Londres.
Llena de vida y de ilusión, creo que Carolina se convertirá en un referente en los años venideros, un gran talento que no debes perderte como conferenciante o en sus procesos formativos.
Te deseo lo mejor en este nuevo paso que vas a dar en estos días... pero de eso, ya hablaremos entre risas y firmas el próximo viernes 13 en la feria del libro. Y tú ¿te apuntas?
miércoles, 4 de junio de 2008
Mi jefe es chino
Publicado por
Rubén Turienzo
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