Una persona está en mi cabeza, me ayuda a alcanzar mis objetivos, me anima cuando estoy triste y me aporta cientos de momentos de felicidad. Es alguien muy especial para mí por su cercanía, su cariño y por supuesto por hacerme la vida muy fácil.
En lo personal es genial, y aprovechando que esta semana está dedicada a mujeres profesionales, creo que lo mejor es utilizar su ejemplo para ilustrar, nunca mejor dicho, la referencia de una mujer que llegará donde se lo proponga con una ética y valores realmente envidiables.
Su nombre, Diana Rodriguez, creativa e ilustradora fantástica con trabajos a sus espaldas para Disney, ExpoZaragoza08 o Tim Burton y que me ha permitido disfrutar de su arte en las ilustraciones de mi libro que mañana sale a la venta "los tacones de Oz".
He podido disfrutar de su fantástica evolución durante estos años cuando apenas levantaba el pincel del suelo y creía que el trabajo era sólo una forma de ganarse la vida.
Poco a poco comenzó a ordenar sus prioridades y dejó salir a flote su genial creatividad y su valor, tanto en talento como en valores humanos. Los proyectos importantes comenzaron a llegar y pese a su juventud, siempre ha sido una persona valiente y comprendió que debía seguir formándose y preparándose, respondiendo siempre con efectividad y rapidez. Aunque eso no tiene mérito cuando se es auténticamente genial en el uso de sus pinceles y tiene la facilidad de ver lo que necesita cada proyecto casi instantáneamente.
Profesionalmente no deja de ascender, cada vez es más reconocida y se está haciendo un hueco en el dificil pero atractivo panorama de la ilustración en España, trabajando ahora en un corto de animación con el que esperan, ell y el equipo de Hampa Studio, hacer un buen papel en los festivales del año que viene. Espero que alcance siempre todas y cada una de las metas que se ha planteado.
Este es el ejemplo de una buena líder o como a cierta persona le gusta decir, una auténtica lideresa. Una persona que escucha, que es empática, que evoluciona y se adapta a las fisuras del mercado, que trabaja cada instante para mejorar. Una persona amable, cercana, capaz, tolerante, visionaria y feliz. Alguien que está a gusto con su vida y que intenta mejorar su existencia sin pisar ni apabullar a nadie. Diana crece por sus méritos, Diana es todo un ejemplo de mujer profesional.
Diana es una de las mejores personas que han pasado por mi vida y espero poder seguir disfrutando de ella y de su talento durante mucho tiempo.
Gracias por estar siempre ahí. Gracias por compartir tanto conmigo.
jueves, 29 de mayo de 2008
Un ejemplo especial
Publicado por
Rubén Turienzo
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